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"Contrariamente a muchos historiadores que prefieren ignorar el inter�s de los nazis por el ocultismo, el autor sostiene que no se puede analizar la acci�n pol�tica de los nazis sin tener en cuenta las particularidades del ocultismo nazi.Mucho antes de ser una visi�n pol�tica de Alemania y del mundo, el nazismo fue un misticismo. Es bastante normal hablar de un misticismo nazi, en la medida en que el nazismo ten�a como fundamento un conjunto de creencias y pr�cticas que ten�an por objeto la uni�n del hombre y el principio del ser. El principio del ser aqu� no se basaba s�lo en la divinidad y la naturaleza, sino tambi�n en la idea de la supremac�a de una raza, la raza aria; la idea de la dominaci�n mundial de un pueblo, el pueblo germ�nico. Adolf Hitler era un iniciado, los nazis eran aficionados al ocultismo. Un iniciado puede definirse como un hombre que mediante un duro trabajo de transformaci�n interior se esfuerza por transformar las vibraciones de su esp�ritu. Seg�n muchos esoteristas, entre ellos Samael Aun Weor, el gran maestro de los gn�sticos, Hitler experiment� la iniciaci�n espiritual de la Ilustraci�n, pero m�s tarde se desvi� cuando conoci� a un mago negro del T�bet. Hitler no era s�lo un pol�tico megal�mano sin conocimientos espirituales. Es dif�cil ver a Hitler como un iniciado iluminado, tan oscuras son sus obras. No ser�a exagerado decir que antes de ser un pol�tico genial, Hitler era ante todo un iniciado de las tinieblas, un mago negro. Desde Alejandro Magno hasta Napole�n Bonaparte, pasando por Gengis Kan, �puede un hombre decidirse a conquistar el mundo sin recurrir a las fuerzas del esp�ritu? Adolf Hitler no era un loco que quer�a conquistar el mundo, conoc�a perfectamente las fuerzas con las que hab�a pactado. Es importante recordar las palabras de Dietrich Eckart, mentor de Hitler, que en su lecho de muerte dijo: ""Seguid a Hitler. �l bailar�, pero yo escrib� la m�sica. Le abrimos los ojos y le dimos los medios para comunicarse con ellos. No me llor�is: habr� influido en la historia m�s que ning�n otro alem�n"". Cuando Dietrich Eckart dice ""Le abrimos los ojos y le dimos los medios para comunicarse con ellos"". �Qu� quer�a decir exactamente? �Y qui�nes eran esas personas con las que Hitler pod�a ahora comunicarse? Consiga este libro y descubra la otra cara de Hitler, descubra c�mo el ocultismo y la magia negra fueron la base de la doctrina nazi y del destino del Tercer Reich, y descubra muchas an�cdotas sobre las pr�cticas esot�ricas de los l�deres nazis."

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9798842531721

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